Hoy me gustaría pedirle disculpas a Giannis Kotsiras. Realmente tenía una mala imagen de él, propiciada quizá por el destrozo que hizo de grandes clásicos de entexno y laika en su disco "Live". Pero ya me extrañaba a mí que Haris Alexiou repitiera compartiendo escenario con él.
Pues bien, esta mañana he escuchado en la emisora griega Diesi su último single, dentro del álbum del mismo nombre "Kai pali paidi". Y buscando el vídeo en el YouTube me he encontrado con esta actuación en directo:
Acabo de ver el cartel del próximo concierto de Elefthería Arvanitaki en Madrid y no puedo esperar para contároslo. Antes de que se aplazara, no tenía intención de ir... pero después de haber escuchado unas 234 veces su último disco, allá que voy de cabeza!!!
Un año más, la comunidad griega de Madrid, a través de la Asociación Cultural Hispano Helénica y la Asociación de Griegos Residentes en España, se volvió a reunir (cada año con más retraso, por cierto) para bendecir, cortar y deglutir (a duras penas) el bollo de reyes o Basilópita.
Y allí estábamos nosotros, amenizando la velada junto con el grupo Cafodío (veteranos en la materia) y un invitado especial, el político, dueño de restaurantes y cantante en sus ratos libres Kostas Karapanagiotidis, acompañado al violín por Antonis Kalatis.
Todo esto estuvo genial, pero lo mejor, como siempre, "la barra libre", es decir, el momento en que cada uno puede bailar a su gusto los temas que toca el grupo, y los griegos y los españoles nos mezclamos al azar para disfrutar y olvidar las penas por unos minutos.
Con este título de canción griega que me viene tan "al pelo", aprovecho para celebrar el bicentenario del nacimiento de Charles R. Darwin. Como dice la canción, hoy todo nos recuerda a él:
La revísta científica Nature le dedica su portada, con el lema "Todos somos Darwin", o mejor dicho, todos somos lo que él dijo que éramos.
Hasta el buscador Google se hace eco de la noticia dedicando su tradicional cambio de logo a los pinzones de Darwin, símbolo de su escala en las islas Galápagos durante su viaje en el Beagle y pieza clave en su teoría que formuló en el libro "El origen de las especies" (siempre me ha fascinado el título completo en inglés: On the Origin of Species by Means of Natural Selection, or the Preservation of Favoured Races in the Struggle for Life).
A continuación os pongo el enlace a una breve reseña de su vida y obra, que se centra especialmente en su particular disputa (cientifica y personal) con la religión:
Y por último, una anécdota muy conocida, pero que refleja perfectamente la antipatía que despertó su obra: los propietarios de la marca Anís del Mono no dudaron ni un segundo en aprovechar la polémica y cambiar el logo de su producto por una caricatura del propio Darwin, que se mantiene hasta nuestros días.
Gracias a mi amigo Pasi me he dado cuenta de que ha pasado otro año más y ya se está volviendo a hablar de ese escabroso tema que tantos disgustos nos da a los eurofans. Mi actitud, ya lo sabéis, es pasar completamente de si mi país hace el ridículo o no y aprovechar la oportunidad para ver si pesco algo de interés.
Este año en Finlandia se lo han tomado tan en serio como siempre, y viendo el video que os pongo a continuación, con todos los candidatos para la preselección, he tenido una gran sorpresa:
Una de ellos es, nada más ni nada menos, que Riikka, antes conocida como Riikka Väyrynen, y ahora señora de Timonen (sí, sí, de mi admiradísimo Marko Timonen). Ambos dos fueron componentes de Värttinä en su día (para mí, Marko es el mejor percusionista que ha tenido la banda, con diferencia) y allí se conocieron y se "fugaron" juntos (siempre me ha encantado esa historia de amor, tergiversada por mi calenturienta imaginación).
Pues ahí os dejo con la canción que Riikka presenta al concurso y mis mejores deseos de que los finlandeses la voten como locos y alguien lleve algo "decente" a la edición del ESC que se celebrará el próximo 16 de mayo en Moscú.