14 de mayo de 2008

Sobre lo nuevo de Manolo García, segunda parte

Ayer a primera hora ya estaba yo comprándome el último disco de Manolo García. Ahí van unas consideraciones al respecto:

En cuanto a su contenido: para los que no estén acostumbrados a la nueva etapa en solitario, avisar que todos sus trabajos, y especialmente este último, son libros de poemas recitados. No pueden ni deben escucharse como quien escucha un disco de pop, porque no lo es. De hecho, entiendo que a alguien le parezca aburrido, incluso insoportable, escuchar un disco suyo del tirón. A mí me gusta o bien escuchar canciones sueltas, como si leyera poesía, o bien escucharlo entero distraída, mientras paseo o viajo, y dejar que las palabras se me peguen a pequeños fragmentos en la conciencia y meditar entonces sobre ellas. Sería imposible extraer aquí todos los versos que me llaman la atención y los sentimientos que me asaltan al escucharlo, así que os recomiendo que os lo compréis y los descubráis por vosotros mismos.

En cuanto a la utilidad (a raíz de algunos comentarios del propio Manolo García en las últimas entrevistas): para mí, todo su trabajo, cada disco, cada canción, cada verso es una ayuda, me produce alivio, simpatía (en el sentido griego de la expresión –compartir pasiones-). Creo que para él en eso consiste su trabajo. Y por eso pago.

En cuanto a su vida privada: hasta ahora su actitud me parecía prudente, una decisión respetable, pero hoy (después de tanta telebasura) pasa a parecerme admirable: su COHERENCIA, su FALTA DE HIPOCRESÍA, su HUMILDAD. ¡Gracias por el ejemplo! Es la mejor manera de defender aquello en lo que crees.

En cuanto al ecologismo: ha demostrado, no sólo que sabe de biología más que muchos biólogos (me incluyo), sino que supo prever y luchar desde el principio por los problemas que se nos vienen encima, como una obligación moral de actuar desde cualquier nivel, ya seas una persona pública con capacidad de decisión o un simple ciudadano, porque cada granito de arena cuenta. Una vez más, él predica con el ejemplo: con sus letras, con sus apoyos a ONGs y seguro que con sus pequeños actos cotidianos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tengo que confesarte que hace tiempo que la Música ed Manolo García ha escapado de mi dicha. Me quedé en su época de El Ultimo... Eso sí, las letras siguen siendo verdaderos poemas de un gran poeta.
Besos