Y levantas la mirada esperando que un hombre, el que tenga más sangre griega de los presentes, se levante de la silla como si un muelle lo empujara y empiece a girar y girar, encorvado y poseído, dejándose llevar por el ritmo de un zeibékiko.
P.D.: Aunque no se cite en el texto, es imprescindible asociar el zeibékiko a la profunda voz de Dimitris Mitropanos. De hecho, me gustaría aclarar que el título de esta entrada es la traducción de su disco doble en directo "Yparxei kai to zeibékiko". Tratándose de zeibékikos, ¡él es el rey!
P.D. 2: echad un vistazo a esta entrada del blog "El Rincón de Orfeo": eso es un zeibékiko bien bailado!
http://elrincondeorfeo.blogspot.com/2008/02/song-of-stelios-kazantzidis-danced.html